QUE SIGNIFICA ¡DEJA QUE LOS MUERTOS SEPULTEN A SUS PROPIOS MUERTOS!

Hay un Pasuk en el Brit Hadasha de MattiYaHu que suele llamar la atención, o peor aún, que choca literalmente a muchos Ahim, es el acontecimiento en que un Talmid a quien Yahushua le dice que lo siga, le pide al Rabi que le permita primero enterrar a su padre terrenal. Para comprender cómo la respuesta de Yahushua debe haber sorprendido fuertemente al Talmid, así como nos sorprende a nosotros, hay que tener en cuenta que, para los Iahudim/judíos de entonces, como lo es para todos, una de las obras de Rahem/misericordia más encomiables era precisamente la de sepultar o enterrar a los difuntos, ese era un deber de ahavah/amor familiar que el talmid, como buen hijo, quería cumplir con su padre terrenal fallecido. Leamos los textos en dos citas que mencionare: “Otro de los talmidim le dijo: "Adón, primero déjame ir y sepultar a mi padre." 22 Pero Yahushúa respondió: "Sígueme y deja que los muertos sepulten a sus propios muertos." (MattiYaHu 8:21,22) “A otro le dijo: "¡Sígueme!", pero el hombre respondió: "Adón, deja que me vaya a enterrar a mi padre." 60 Yahushúa le dijo: "Deja que los muertos entierren a sus propios muertos; ¡tú ve, y proclama el Reino de YAHWEH!" (Shilah/Lk 9:59,60). El talmid debe haber entendido lo que Yahushua le decía, pues no se registra que le desobedeciera, el talmid entendió sus palabras. Pero ¿nosotros? ¿Qué cosa quiere decir Yahushua con eso de que los muertos entierren a sus propios muertos? ¿Cómo puede un muerto enterrar a otro muerto? ¿Quiénes eran esos muertos que según Mashiah debían enterrar a sus muertos? La frase suscita una multitud de interrogantes que se aclaran en parte si pensamos que Yahushua debe haber empleado la palabra "muerto" en dos sentidos diferentes en la misma frase. Los "muertos" que entierran a sus propios "muertos" no están muertos en el mismo sentido en que están muertos los que son enterrados. Obvio. Pero ¿en qué sentido están muertos los primeros, si son capaces de enterrar a los segundos? El siervo Shaulo escribió a los creyentes de Éfeso en el perek 2: 1"Ustedes estaban muertos por sus pecados y actos de desobediencia, 2 caminaban en las sendas del olam hazeh y obedecían al gobernador de los poderes del aire, que todavía está operando en los desobedientes de Toráh”. Es decir, viviendo como vive la mayoría de la gente, a su manera y a espaldas de Avinu Kadosh, en otras palabras a la respuesta de Mashiah, deja que tus parientes que están muertos por la vida de pecado que llevan entierren a tu padre, que cumplan ellos ese deber, pero tú, que ya no estás muerto, sino vivo, ven y sígueme. ¿Cómo es que ese joven estaba vivo, y ya no muerto, como sus familiares? Hablando de Yahushua, Yahanan, escribe: "En Él estaba la vida, y la vida era la Lumbrera de la humanidad” (1:4). El talmid de Yahushua estaba vivo porque estaba en contacto frecuente con aquel en quien estaba la vida; no estaba muerto porque se le había contagiado por así decirlo, esa vida que Yahushua tenía. Pues bien ¿cómo se le había contagiado? ¿Cómo había recibido esa vida? Las Escrituras, querido Ahí, Ahot ve chaver que me lee, son como un rompecabezas compuesto de millares de piezas de tamaño y forma diferente, que encajan unas con otras, y que se encuentran dispersas a lo largo y ancho de todas sus páginas; y que, una vez, colocadas en su lugar, forman una bella serie de cuadros armoniosos, busquemos las piezas que llenen los vacíos que quedan, para que podamos ver y entender completamente del tema que estamos tratando. En el sefer del emisario Kefa escribió que los creyentes en Mashiah “han nacido de nuevo de lo alto, no de una semilla que se corrompe, sino de una incorruptible, por medio de la Palabra viviente de YAHWEH que permanece para siempre” (Kefa Alef 1:23) “Han nacido de nuevo”, esto es, han renacido, engendrados por una semilla incorruptible, que es la palabra viviente de YAHWEH, de la que brota una nueva vida, estos son los que "Deben estar conscientes que el rescate pagado para librarlos de su despreciable manera de vivir, que sus padres le pasaron a ustedes, no era como algo perecedero, como la plata o el oro;” (Kefa Alef 1:18) es decir, en la que estaban muertos, aunque parecía que vivían. Vemos pues que tanto el sefer de Efesos como el sefer de kefa Alef, hablan de la misma cosa: del haber estado muertos por sus pecados y actos de desobediencia y del haber nacido a una nueva vida, mediante una semilla que no se corrompe, como la semilla humana natural de la que surge la vida física, sino de una semilla incorruptible, por la que se recibe la vida imperecedera del Ruah. Eso nos recuerda la famosa conversación de Yahushua con el perushim Nakdimon, que vino a buscarlo de noche para que sus colegas no se enterasen y que empezó diciéndole: "Rabí, sabemos que es de Elohim que has venido como maestro; porque nadie puede hacer estos prodigios que Tú haces si Elohim no está con El" (Yahanan 3:2). A este varón cuyos conceptos han sido cuestionados por las cosas que dice y hace Yahushua, y que, siendo un sabio de Yisrael, está intrigado por la enseñanza nueva que ha escuchado de labios de Yahushua, el Moreh/Maestro, sin darse por aludido por el elogio, le dice sin muchos miramientos: "Yo te digo que a menos que una persona nazca de nuevo de lo alto, no puede ver el Reino de YAHWEH" (Yahanan 3:3). Frente a la sorpresa del perushim que contesta: "¿Cómo puede un hombre nacer siendo adulto? ¿Puede acaso volver al vientre de su madre y nacer una segunda vez?"(Yahanan 3:4), Yahushua sin responderle directamente, le reitera en términos ligeramente diferentes el mismo pensamiento: "…Yo te digo que a menos que una persona nazca de agua y del Ruaj, no puede entrar en el Reino de YAHWEH” (Pasuk. 5), es como si Mashiah le preguntara: ¿Tú quieres entrar en el reino de YAHWEH, tal como tú y tus compatriotas, como buenos Iahudim/judíos, ardientemente quieren? Pues bien, tienes que volver a nacer, tienes que nacer de nuevo, pero esta vez no de tus padres mortales, como ya naciste, sino de agua y del Ruah. Y Mashiah le explica para que el perushim no siga perplejo: " Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Ruaj, ruaj es” (Pasuk. 6). A la semilla que produjo el primer nacimiento corresponde el cuerpo físico que ahora tenemos y que surgió de ese nacimiento. A la semilla espiritual del segundo nacimiento, corresponde un cuerpo espiritual, que aún no tenemos, pero que necesitamos para poder entrar en el reino de los shamayim/cielos, ambos cuerpos son de naturaleza diferente: una, es carne y sangre; la otra, agua y ruah. "¡Deja de estar sorprendido de que te diga (dice Yahushua) que tienes que nacer de nuevo de lo alto!” (Pasuk 7) A la naturaleza de cada reino, corresponde representativamente un cuerpo adaptado a ese reino, al reino material de este mundo, corresponde el cuerpo material que ahora tenemos, al reino de Avinu Kadosh, que es espiritual, corresponde un cuerpo espiritual (Nota), sin el cual no podemos ver ni entrar en ese reino, esto es, la naturaleza de Avinu Kadosh YAHWEH. En el mismo sefer de Yahanan del perek 1, el escribe que Yahushua, pasuk 11 "vino a su propia tierra natal, y su propio pueblo no lo recibió, pasuk 12 Mas, a todos los que le recibieron, a aquellos que ponen su confianza en su persona y su poder, Él les dio potestad(o el derecho) de convertirse en hijos de YAHWEH” y sigue diciendo: “no por herencia sanguínea, ni por impulsos físicos, ni por intención humana, sino porque YAHWEH así lo dispuso” (Pasuk 13) Obviamente aquí está hablando de un nacimiento de otro orden, que no tiene su origen en un querer carnal humano, sino que proviene directamente de lo alto, es decir, de YAHWEH, es un nacimiento de carácter espiritual, que convierte al que lo experimenta en hijo de YAHWEH, algo que no era antes. Esta afirmación puede sorprender a quienes estén acostumbrados a pensar que todos los seres humanos son, por definición, hijos de YAHWEH, pues no lo son, en el sentido del Brit Hadasha. Hijos de YAHWEH son aquellos que según el sefer a los Gálatas reciben el Ruah de Yahushua en nuestros corazones por el cual el Ruah puede clamar. "¡Abba! (esto es, Amado padre)" (Gal 4:6). En otras palabras: Nadie es hijo de YAHWEH por nacimiento; nadie nace siendo hijo de YAHWEH, somos hechos hijos de YAHWEH cuando recibimos a Mashiah en nuestros corazones es que somos adoptados como tales por Avinu Kadosh, según explica el pasuk de Yahanan que hemos citado hace un momento, recordemos que el nombre de Yahushua quiere decir: "YAHWEH salva", este punto requiere de una explicación, en el sefer a los Efesos, Shaulo escribe que hemos sido salvos por rahem/misericordia, esto es, por medio de confiar, y que esto es un don de YAHWEH. No es de nuestras propias obras, es decir, por ninguna cosa que haga o pueda hacer el hombre (Ef 2:8,9), pues de lo contrario tendría de qué jactarse. ¿Qué quiere decir hemos sido salvos, si aún estamos vivos? La salvación de que aquí se habla no es una salvación futura, sino una salvación permanente, la semilla incorruptible, de la que escribe kefa; el nacer de nuevo del que habla Yahushua a Nakdimon; el de convertirse en hijos de YAHWEH, del que habla el Emisario Yahanan, es creyendo en Yahushua, es creyendo en su obra redentora, como somos perdonados, justificados, nacidos de nuevo, esto es, salvos del pecado en que vivíamos, con todas sus consecuencias, incluyendo la condenación infinita, No es por ninguna obra que hayamos hecho, ni por ningún mérito nuestro, es algo enteramente gratuito, es obra de la Rahem/misericordia de Avinu Kadosh. ¿Y cómo viene esa confianza que nos permite recibir esa Rahem de la salvación? ¿Acaso por investigar, o por pensar mucho? ¿O por repetirme “Yo tengo emunah, yo tengo emunah”? No. Avinu Kadosh ha previsto una manera más sencilla, accesible a todas las personas, aun a las más ignorantes: Por oír simplemente, Eso es todo. ¿Nada más que por oír? Así es. Dice una famosa frase del siervo Shaulo, que seguramente alguna vez habrás leído o escuchado: "Así que la confianza viene de lo que es oído, y lo que es oído viene de una palabra proclamada sobre el Mashíaj”.(Rom 10:17) Esto es, la confianza viene cuando escuchamos hablar acerca de Yahushua y algo sucede en nuestro interior, que recibe, que acepta aquello de que se habla, y que nos hace creer en lo que escuchamos, esa palabra escuchada y creída se convierte en la semilla incorruptible que nos hace nacer de nuevo, y que, analógicamente, hace las veces de la simiente que hace brotar una nueva vida de orden espiritual en nosotros. “Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Ruaj, ruaj es”. Ya lo hemos leído (Yahanan 3:6). En una ocasión Yahushua dijo: "¡Sí, en verdad Yo les digo que cualquiera que oye lo que estoy diciendo, y confía en el que me envió, tiene vida eterna, esto es, no vendrá a juicio, sino que ha cruzado de la muerte a vida!" (Yahanan 5:24). Fíjense que dice: "tiene vida eterna", la tiene ya en tiempo presente. No se trata de algo futuro. Es ahora. ¿Tienes tú vida eterna? ¿Has creído en Yahushua? ¿Has pasado de muerte a vida, como el talmid del que hemos hablado al comienzo? ¿Estás seguro de ello? ¿Tienes la seguridad de que Mashiah habita en ti? Si no la tienes, necesitas tenerla para ser salvo y escapar del lago de fuego. Sí, del lago de fuego, algo tan terrible que menciona el sefer de revelaciones que no se lo quiero ni al peor de los criminales, esa es la cuestión más crucial de toda la existencia, porque, como dijo Yahushua; “¿De qué le servirá a alguien, ganar el mundo entero, si pierde su vida? ¿O qué puede dar alguien, a cambio de su vida? ¿De qué te sirve ganar el mundo si pierdes tu alma?” (Mattiyahu 16:26). Para concluir mis estimados Ahim, Ahaiot ve chaverim, naturalmente no se trata de un cuerpo propiamente dicho sino de una realidad espiritual, pero nuestro fruto futuro sí será un cuerpo: el cuerpo inmortal que todos los salvos en Mashiah recibiremos en la resurrección, al final del shofar; “¡Miren, les digo un secreto! ¡No todos nosotros moriremos! ¡Pero todos seremos trasformados! 52 Sólo tomará un momento, en un abrir y cerrar de los ojos, al Shofar final. Porque el Shofar sonará, y los muertos serán resucitados para vivir eternamente y nosotros también seremos transformados. 53 Este material que se corrompe tiene que ser revestido de incorrupción, esto que es mortal tiene que ser revestido de inmortalidad. 54 Cuando lo que se corrompe se vista de incorrupción; y lo que es mortal se vista de inmortalidad, entonces este pasaje del Tanaj será cumplido: "La muerte será tragada exitosamente." (Qoorintoh Alef/1Cor 15:51-54).

Espero me haya hecho entender en este tema tan importante, que la Shalom del Mashiah Yahushua este con todos ustedes.

PUEDEN ESCUCHAR EL TEMA EN AUDIO HACIENDO CLIC EN EL ENLACE DE ABAJO: